El estudio revela una lamentable realidad: una de cada cuatro personas LGTBI+ de la Generación Z ha sido víctima de acoso escolar debido a su orientación sexual o identidad de género. Este fenómeno no solo demuestra la continua presencia del estigma y la discriminación, sino también la pasividad con la que muchos centros educativos manejan estas situaciones.
Aunque los porcentajes relatan una historia inquietante por sí solos, detrás de cada cifra hay experiencias personales de sufrimiento, aislamiento y, en muchos casos, abandono escolar. Las formas de acoso varían desde insultos hasta la violencia física, siendo los años de la ESO especialmente críticos para los estudiantes LGTBI+.
Pero quizás lo más preocupante es la respuesta —o la falta de ella— El 64% de los casos de acoso reportados, los centros educativos no tomaron medidas efectivas. Esta inacción no solo perpetúa el ciclo de abuso sino que también envía un mensaje claro de indiferencia hacia el bienestar y la seguridad del colectivo LGTBI+ en el ámbito educativo.
Además, el 18,9% de las personas LGTBI+ abandona la escuela prematuramente, una tasa significativamente más alta que la del resto de la población estudiantil. Esto no solo impacta su desarrollo personal y educativo, sino que también limita sus oportunidades futuras en la sociedad.
Hacia un futuro inclusivo en los centros educativos
Las conclusiones de este estudio son inequívocas: es esencial no solo implementar, sino también intensificar las políticas de inclusión y diversidad en nuestros centros educativos. Esta tarea implica avanzar más allá de simplemente sancionar el acoso y la discriminación de forma efectiva.
Desde Andalucía Diversidad, nos unimos a la petición impulsada por la FELGTBI+ para la creación de una Comisión Nacional Educativa enfocada en cuestiones LGTBI+. Con esta acción, reafirmamos nuestro compromiso por promover un sistema educativo que no solo acepte la diversidad, sino que la celebre abiertamente, en contraposición a cualquier forma de censura o discriminación. Estamos convencidas de que el camino hacia una sociedad plenamente inclusiva y respetuosa con las futuras generaciones, comienza con una educación que ponga la diversidad en el centro de sus valores fundamentales.