Entendamos el concepto de salud mental
Antes de que entremos en detalle sobre la unión de los conceptos de salud mental y colectivo LGTBIQA+, es de total importancia que comprendamos la magnitud del primero.
Hablar de salud mental no es únicamente hablar de diagnósticos como los de depresión, trastorno límite de la personalidad. En absoluto. Tener una buena salud mental NO es sinónimo de ausencia de trastornos mentales. De hecho, no tener un diagnóstico no es sinónimo, en ningún caso, de gozar de una buena salud mental.
Tal y como establece la Organización Mundial de la Salud (2022), la salud mental es un estado de bienestar mental que permite a las personas hacer frente a los momentos de estrés de la vida, desarrollar todas sus habilidades, poder aprender y trabajar adecuadamente y contribuir a la mejora de su comunidad. Es parte fundamental de la salud y el bienestar que sustenta nuestras capacidades individuales y colectivas para tomar decisiones, establecer relaciones y dar forma al mundo en el que vivimos. La salud mental es, además, un derecho humano fundamental.
Cuando hablamos de este concepto, también estamos haciendo referencia a:
- Habilidades de gestión emocional.
- Afrontamiento de problemas y capacidad de solucionarlos.
- Bienestar o malestar social.
- Facilidad para acceder a determinados recursos (alimentación, salud, entre otros).
- Capacidad para tomar decisiones.
Como verás, engloba mucho más que el padecer ansiedad o depresión, a pesar de que estos son conceptos, también, fundamentales en la salud mental, dada la alta frecuencia con la que aparecen en la población actual.

Salud mental y colectivo LGTBIQA+
Como ya podías estar anticipando, las personas del colectivo LGTBIQA+ tienen mayor riesgo de padecer situaciones difíciles de salud mental. ¿Significa eso que ser gay trae ansiedad? ¿O que ser trans te va a meter en una depresión? No. De ninguna forma. En absoluto.
Ser una persona del colectivo LGTBIQA+ supone un riesgo debido a la sociedad en la que convivimos. Se trata de una sociedad donde el rechazo, la discriminación y las violencias son muy fáciles de encontrar en las noticias. El estigma que recibimos todavía hoy en día nos predispone a vivir en entornos donde se nos violenta, se nos amenaza, se nos discrimina.
Este mismo año, la Confederación SALUD MENTAL ESPAÑA publicó un informe donde se analizaba el estado de salud mental en España, donde se incluía a las personas LGTBIQA+. En La situación de la salud mental en España (2023) se destaca, con respecto a esta población:
- Altos niveles de riesgo de suicidio.
- Más del doble de intentos de suicidio comparados con la población cishetero.
- Porcentajes muy elevados de autolesiones.
- Problemas relacionados con la ansiedad en casi el 50% de la población LGTBIQA+.
Gracias a otras investigaciones, conocemos que la población queer es más susceptible, en comparación con la población cishetero, de sentir insatisfacción vital, vergüenza y/o culpa además de LGTBIQAfobia interiorizada, mantener conductas como afrontamiento a problemas de consumo de alcohol y otras drogas, sufrir acoso o de padecer condiciones del estado del ánimo como son la depresión o la ansiedad.
